Las economías han fracasado aún con los adelantos en productividad y la desigualdad ha aumentado en términos globales. El futuro a construir será más igualitario y sostenible porque la economía no puede funcionar de manera aislada a la sociedad y al entorno; es una responsabilidad compartida.
La capacidad de innovar resulta imprescindible para hacer frente a la crisis y conseguir crecimiento económico; el progreso no lo es sin la innovación como ingrediente.
También la innovación social en el actual panorama económico está cobrando mucha importancia y continuará haciéndolo porque podría llegar a considerarse un sector en sí mismo.
Hasta ahora los agentes sociales se han venido financiando mediante la Administración pública, Fundaciones, Empresas Internacionales, Instituciones, Universidades..., pero no del grueso de las empresas del país, empresas como la tuya, con 3, 10 o 25 personas trabajando.
La empresas, especialmente las pequeñas, tienen mucho que aportar a las causas sociales, pero, este factor, también se convertirá en un elemento diferenciador, eso que tanto desean para competir en un mercado cada vez más exigente. Aquellas que sean capaces de incorporar a su estrategia de negocio la RSC, tendrán más capacidad para ser sostenibles y superar la recesión.
Y ahora viene la pregunta que te estás haciendo: si mi empresa es pequeña, apenas tenemos recursos...¿cómo vamos, además, a colaborar en esto?
No es difícil, en serio; en ocasiones basta con algo de imaginación
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